Es frecuente el uso de términos como guerracivilismo, joseantoniano
Por lo que respecta a las siglas, ellas generalmente provienen del lenguaje económico (ONG, Organización no Gubernamental)
Hay también derivados de siglas, como etarra, miembro de la organización ETA, pesoista, miembro del partido socialista obrero español
Entre los neologismos (en prevalecía semánticos) hay: clave (= interpretación), cobertura (=protección), óptica (=perspectiva), barón (= persona influyente), bolsa (=grupo o conjunto), halcón (= político intransigente)
Hay también el uso de expresiones fijas, que caracteriza el discurso político: acuerdo económico social, cohesión social, cohesión territorial, concentración social
Emisor y destinatario en la comunicación política La función dominante del lenguaje político es la apelativa, se tiende a convencer a los ciudadanos de una determinada idea o de la conveniencia de realizar una acción. Con este fin, el texto político se difunde con una gran cantidad de géneros orales y escritos, como la intervención parlamentaria, el mitin, el discurso, la conferencia. La relación entre los interlocutores es muy variada en función del registro que adopta el lenguaje politico, y por eso se oscila entre la formalidad del discurso parlamentario, sometido a reglas institucionales, y el comentario politico que muchas veces se realiza de manera muy informal.
Hay tres niveles de especialidad:
En el primero, o sea la comunicación entre especialistas, los estudios de ciencia politica. Hay una alta densidad de terminologia específica y una organización rigurosa del contenido. Las tesis doctorales pertenecen a este nivel. En el texto hay una gran presencia de términos técnicos, con rasgos formales y estructurales propios del lenguaje de las ciencias humanas. El tono no es emotivo, se expone una conclusión derivada de una argumentación precedente
En el segundo nivel, la comunicación es entre especialistas y semi especialistas. Un semi especialista es un tipo especial de ciudadano, un militante de un partido, elque realiza algún tipo de labor política y los técnicos de la administración: son éstos los que leen las resoluciones de los congresos de los partidos, los que escuchan los debates parlamentarios, los que consultan los anuarios, las memorias de actividades de las instituciones, las revistas especializadas. En este nivel el emisor quiere divulgar una idea o una actuación política, aunque hay una intención persuasiva, razón por la que hay una simplificación de los contenidos y del léxico especializado. La densidad de términos especializados es alta. Casi siempre el tono pretende ser científico. Se usan además expresiones del lenguaje común o términos cultos.
En el tercer nivel la comunicación se establece entre especialistas y público. Aquí encontramos el comentario político y lo que se llama "el lenguaje de los políticos". El primero, es un discurso a propósito de la política, en el que se trata de intercambios conversacionales entre amigos, en familia o en los debates radiofónicos o televisivos. En el lenguaje de los políticos domina la función apelativa, en la que con más intensidad se manifiesta el discurso del poder. El político pretende convencer o seducir a un electorado. El emisor en este nivel muchas veces es colectivo, aunque formalmente se presente un autor individual: detrás de la elaboración de este mensaje puede estar una agencia de publicidad, un grupo de asesores o de diputados que elaborarán un mensaje común para que lo pronuncie un candidato o un portavoz. El receptor a veces es directo y otras indirecto.